Es una de las ciudades medievales de origen romano mejor conservadas de Europa, cuyo casco antiguo amurallado oculta puertas y pasajes secretos.
Con su ciudadela amurallada, torres coloridas y calles empedradas, ofrece una experiencia única llena de historia y encanto.
Los visitantes pueden disfrutar de acogedoras cafeterías, tiendas de artesanía local y festivales tradicionales que llenan la ciudad de vida y color durante todo el año, convirtiéndola en un destino imprescindible para quienes buscan cultura y autenticidade.
VISITA A PIE DE LA CIUDAD
Podrás descubrir la emblemática Torre del Reloj, disfrutar de las vistas panorámicas desde la Iglesia de la Colina y visitar la casa natal de Vlad Drácula, además de pasear por callejuelas llenas de historia y encanto.
No te pierdas los museos locales que conservan artefactos medievales y la oportunidad de probar la gastronomía tradicional en restaurantes típicos, donde cada rincón cuenta una historia diferente.